Cuenta Simen Agdestein en su bonito
libro sobre Carlsen titulado “Wonderboy”
que narra como nadie los inicios de este maravilloso niño prodigio, que en los primeros días del mes de Mayo del año 2002,
Magnus jugó a través de Internet, por medio de la compañía noruega de Noticias,
Nettavisen, un encuentro contra todos
los aficionados del mundo, siguiendo un poco el modelo popularizado en aquella
época por Garry Kimovich Kaspárov; del que este cronista se hizo como recuerdo
con un bonito libro donde Gazza comentó en todo él sus propias experiencias
surgidas a diario durante este tipo de enfrentamientos, con unos análisis, en
su caso, que excedían en aquel tomo, ¡los límites humanos!.
Un libro tremendamente difícil de leer y de entender
250.000 votos a través de la Web
fueron los recibidos por Nettavisen
para una partida que acabó en tablas tras 31 movimientos:
1)
Carlsen,
Magnus (2163)-Resto del Mundo; Carlsen-The Net, Nettavisen INT Primera semana
de Mayo hasta mediados de Junio de 2002 – ½-½ en 31 jugadas.-
Magnus Carlsen en aquel año 2002
En este cotejo, Magnus, con sólo 11
años de edad, no usó ni libros, ni computadoras, ni ningún tipo de información
de Internet y tampoco ayuda humana para jugarlo.
La partida finalizó el 21 de Junio de
aquel año y el 15º movimiento del “Resto del Mundo” - ver diagrama nº 1 - en donde
habría que decir que la mayoría de votantes eran de nacionalidad noruega, fue ¡impresionante!.
(Para ampliar la imagen haga "click" sobre ella):
Diagrama nº 1
El módulo informático actual “Stockfish
8” sugiere hoy en la “Nube de Chessbase” una mejor continuación anterior para
Carlsen.
Las complicaciones que surgieron tras
aquel sacrificio de peón de Magnus fueron muy bien calculadas por ambos bandos
y cuando la situación se despejó (diagrama nº 2) se llegó a un final de cuatro
torres igualado que dejó “nula” la partida.
(Para ampliar la imagen haga "click" sobre ella):
Diagrama nº 2 y partida completa
Ya en los albores del S.XXI,
estimados lectores, con la ayuda de las computadoras, la situación formal ante el tablero de la formación del “Resto del Mundo” se solidificó y
resultaba prácticamente imposible para las estrellas, como ya era aquel niño, obtener
la victoria en este tipo de enfrentamientos, pues el chico recibía una
respuesta cada día por las tardes y tenía que mandar su movimiento, como mucho,
en la mañana del día siguiente…
Ajedrez sobre el Planeta
Fdo.- Angel Jiménez Arteaga
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